DARUMA
Los muñecos Daruma (en japonés: 達磨) son figuras votivas sin brazos ni piernas y representan a Bodhidharma (Daruma en japonés), el fundador y primer patriarca del Zen.
Dice la leyenda que el maestro Daruma perdió los brazos y las piernas de estar tantos años escondido en una cueva meditando y sin utilizarlos.
El muñeco tiene una cara con bigote y barba pero sus ojos son blancos del todo. Los ojos del Daruma se utilizan como recordatorio y motivación a cumplir metas o grandes tareas.
El dueño del muñeco pinta una pupila redonda al establecer su meta; cuando esta se ha cumplido se procede a pintar el otro ojo. Un daruma con una sola pupila suele colocarse donde éste sea visible, a manera de constante recordatorio del trabajo que debe hacerse para lograr el objetivo.
Ellos cumplieron el suyo.